Vencidos ya dos días en que este Congreso se ha mantenido en sesión permanente desde las 8 de la mañana hasta bien entrada la noche, halla por conveniente encargar a V. S. que respecto a que las gestiones que deben seguirse a la presentación de las solicitudes del pueblo, no pueden, ni conviene que se evacuen en horas intempestivas de la noche, prosiga la comisión que se le ha dado de prevenir a los comandantes militares se reúnan en los puntos que determinasen y leídas las peticiones del pueblo, vean, si en la clase de ciudadanos de la patria, tienen también algo que añadir a lo pedido por el resto de los vecinos, y reuniendo todas las solicitudes, se de cuenta por ese Ilustre Cabildo para que el Excelentísimo señor Presidente cite a los diputados del Congreso, para una hora oportuna y pase V. S. con los personeros a presentar y pedir lo que hallasen por conveniente y de justicia. Por consiguiente V. S. avisará esta disposición en la parte que corresponda al pueblo que se halla congregado, para que por ahora se retire a sus casas.

Dios guarde a V. S. muchos años. Sala del Congreso y noviembre 16 de 1811.

El Congreso.

Al Ilustre Cabildo, Justicia y Regimiento de esta capital.

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