Los súbditos de este Gobierno que quedan presos en Lima son los siguientes
Don José Vicente Barba. El Padre Aymar. Don Vicente Guzmán. Don Francisco Lastarria. José Manuel Molina. José Rodríguez. Don Luis Ovalle.
Estos ciudadanos cayeron prisioneros por la alevosía cometida en la fragata «Perla», por los enemigos interiores de la libertad. El Gobernador de Lima no los ha tratado como a prisioneros de guerra, sino como a malhechores. Los más de ellos están en el hospital de resultas de la crueldad con que se les trató. Han estado en calabozos húmedos y subterráneos, privados de la luz del sol; incomunicados y fuera del alcance de los patriotas y hombres caritativos. Sólo han recibido dos reales diarios, socorro muy corto en Lima.