SESIÓN DE 8 DE NOVIEMBRE DE 1811.
Sobre nueva fianza que da el subastador del pontazgo de Maipo.- Sobre el ramo de canchas de bolas.

En la ciudad de Santiago de Chile, a ocho días del mes de noviembre de mil ochocientos once, estando los señores  de este Muy Ilustre Ayuntamiento en su sala capitular, se les presentó una boleta de don Manuel Vela, en la que afianzaba a don José Vera, subastador del pontazgo de Maipo, relevando a don Miguel Daroch, y su tenor es como sigue:

Por esta boleta me obligo (otorgándose la correspondiente escritura pública) a relevar de la fianza a don Miguel Daroch, que tiene hecha a la ciudad a favor de don José de Vera, en ochocientos pesos al año, por el remate del pasaje del puente de Maipo, junto a las casas de su habitación, hasta el cumplimiento de los cinco años de su contrata; y además lo afianzo en los seiscientos pesos por la moratoria de los tres meses concedidos por el Tribunal de Apelaciones. Santiago de Chile, octubre veinte y siete de mil ochocientos once.- Manuel Vela.

Y esta boleta fue aprobada.

Después de evacuado este asunto fue presentado un expediente promovido por el subastador de canchas, por el que se demostraba que algunas de ellas no pagaban por estar exentas de este cargo; y conociendo dichos señores que esta cuestión producía muchos entorpecimientos en la materia  acordaron que dicho ramo fuese nuevamente rematado, con la calidad de que el subastador que entrare, cobre las cantidades que anteriormente se adeudaban al antecesor, y que este cubra las ya percibidas, quedando su derecho salvo para lo que haya lugar. Así lo acordaron y firmaron, de que certifico.- Doctor Pedro José González Álamos.- José Antonio Valdés.- Antonio de Hermida.- Nicolás Matorras.- Antonio José  de Irisarri.- José Ignacio Zenteno, Escribano de Cabildo.

 

SESIÓN DE 9 DE NOVIEMBRE DE 1811.
Sobre elegir dos suplentes; Sobre separación de la secretaría de la escribanía.- Nota puesta por el Secretario del Cabildo respecto al libro de actas.

En la ciudad de Santiago de Chile, a nueve de noviembre de mil ochocientos once, estando los señores de este Muy Ilustre Ayuntamiento en su sala capitular, recibieron el oficio del Alto Congreso, de siete del corriente, en que aprobaba la propuesta de este Cuerpo hecha en oficio de cinco del presente, sobre elegir suplientes [sic] a los señores regidores que por sus ausencias y enfermedades no pueden asistir; y pasando a elegir [a] los sujetos que deben suplir por [a] los señores ausentes y enfermos, resultaron electos don Silvestre Lazo por don Justo Salinas; don Matías Mujica por don Francisco González Caravelo; don José Antonio Huici por don José Ignacio Aránguiz; don Tomás Vicuña por don Francisco Arteaga; don Timoteo Bustamante por don Santiago Errázuriz, y don José Manuel Lecaros por don Juan Francisco Larraín. Y habiendo ocurrido la dificultad de si deberían o no usar los suplientes [sic] en las preeminencias de los propietarios por razón a la antigüedad de los señores regidores por [a] quienes suplían, como en el caso de recaer la jurisdicción ordinaria, por falta de los señores alcaldes en los regidores más antiguos, se acordó que la antigüedad no representaban los suplientes [sic], y que en este caso el Regidor propietario menos antiguo gozaría de las referidas preeminencias. Que se pasase oficio al Alto Congreso participándole el resultado de la elección.

Incontinenti se leyó una representación del señor Procurador de ciudad, en que pedía se separase la secretaría del Cabildo de la escribanía y se nombrase un Regidor que hiciese las funciones de secretario, con la gratificación de cien pesos anuales para gastos de papel y plumas, tinta y demás de su resorte, acompañándole un oficial escribiente con sueldo de trescientos pesos al año. Conformándose los señores con esta propuesta, que encontraron de justicia, decretaron a la referida representación lo siguiente:

Apruébese lo propuesto por el señor Procurador General, y en su consecuencia, nombrase para Secretario al señor Regidor don Antonio José de Irisarri, y para su oficial de la secretaría, que desempeñe en sus ausencias y enfermedades, a don Manuel Gandarillas y Guzmán, a quien se le asignan trescientos pesos de sueldo al año, y más cien pesos que se pasarán al Secretario para gastos de escritorio; pásese oficio al Alto Congreso, acompañando la representación y proveído, solicitando la confirmación. Así lo acordaron y firmaron dichos señores. Lo certifico.- Doctor Pedro José González Álamos.- Marcelino Cañas.- José  Antonio Valdés.- Nicolás  Matorras.- Antonio de Hermida.- Antonio José de Irisarri.- José Ignacio Zenteno, escribano de Cabildo.

Hasta aquí corrió el libro de actas del Muy Ilustre Ayuntamiento por mano del escribano del Cuerpo, y desde hoy día de la fecha me he recibido de él en virtud del nombramiento de Secretario que ha hecho en mí el Cabildo y ha confirmación del Alto Congreso de este reino.

En 26 de noviembre se me entregó este libro por ausencia del Secretario don Antonio José de Irisarri, junto con el copiador de oficios. Gandarillas.

 

SESIÓN DE 26 DE NOVIEMBRE DE 1811.
Solicitud de don Ramón Villalón para sacar la línea de su casa.- Que se componga la calle de las Monjitas.- Que se averigüe a quien pertenecen ciertos ranchos.- Doña Mercedes Calderón pretende comprar un sitio perteneciente a la ciudad.- Nombramientos de Regidor y de Abogado del Cabildo.

En la ciudad de Santiago de Chile, en veinte y seis días del mes de noviembre de mil ochocientos once, estando los señores del Muy Ilustre Ayuntamiento en su sala capitular, se leyó una presentación de don Ramón Villalón, en la que pedía permiso para sacar su edificio a la línea de la casa de don francisco González, a la que se puso por providencia “traslado al señor Procurador General”, quien respondiendo inmediatamente, dichos señores comisionaron al mismo señor Procurador y al señor Regidor don Antonio de Hermida para su cumplimiento en virtud del decreto de igual fecha.

Habiendo el señor Procurador hecho presente a este Ilustre Cabildo lo muy maltratada que está la calle de las Monjitas, con motivo de las excavaciones que se hicieron para componer el cañón de la pila, mandaron dichos señores llamar al sota síndico, y le ordenaron que a la mayor brevedad se pusiese en ejecución su compostura.

También se le mandó al predicho sota síndico que averiguase a quién pertenecen ciertos ranchos que están en la Cañada junto a las paredes del Conde de Quinta Alegre.

En dicho día se presentó al Muy Ilustre Ayuntamiento doña Mercedes Calderón, solicitando comprar a censo redimible un sitio perteneciente a la ciudad, que está frente de las casas del finado don Manuel Vidal y lindante con doña Mercedes Gavilán; providenciaron: “traslado al señor Procurador General”.

Habiéndose despedido de este Cabildo el doctor don Silvestre Lazo, que hacía de Regidor supliente [sic] y de abogado de este Cuerpo, el empleo de Regidor se proveyó en don Pedro Solar, que obtuvo la confirmación del Alto Congreso; y el de abogado en el señor Regidor supliente [sic] don Timoteo Bustamante, con referencia al acuerdo con que se eligió a don Silvestre Lazo. Domingo José de Toro.- José Joaquín Rodríguez.- Doctor Pedro José González Álamos.- Nicolás Matorras.- Doctor Timoteo de Bustamante.- Matías de Mujica. Por ausencia del Secretario, Manuel José Gandarillas, Secretario interino.