Por comunicaciones de Mendoza se sabe lo siguiente: Acabamos de saber que los enemigos se han retirado de Salta para Potosí, de resultas de haber padecido con­siderables pérdidas en Cochabamba, en donde una división de 200 hombres fue pasada a cuchillo, por aquellos naturales. El Comandante Arenales derrotó completa­mente otra división de 800 hombres en Oruro, al mando de Lombera. Todo esto tiene al enemigo en la mayor consternación, y el ejército de la patria al mando del gene­ral San Martín que consta ya de 2.500 Infantes y 3.000 caballos, sin contar con el Regimiento de Moldes, que marcha a reunírsele, amenaza la total ruina del decaden­te éxito del pirata del Perú. Nuestra escuadrilla salió del río de la Plata el día 7 a batirse con la enemiga; tene­mos por un nuevo conducto 500 fusiles y muchos sables; y nuestra fábrica de armas está en continuo trabajo día y noche, prometiendo con fundadas esperanzas darnos en adelante, de siete a ocho fusiles diarios. Es constante que no ha llegado refuerzo ninguno a Montevideo. Todo nos muestra un semblante risueño y los tiranos que en vano se empeñan en oprimirnos, conocerán muy en breve que es imposible vencer a hombres que han jurado el mo­rir antes que volver a las cadenas de la esclavitud.